9 de noviembre de 2009

You're Awful


...

Frank Sinatra:
Gee I don't know, I'd like to whisper sweet nothings
Those words that everyone knows
But my thoughts gets mangled,
And all the words get tangled,
But since you asked me, here goes:
You're awful, awful good to look at,
Awful nice to be with, awful sweet to have and hold.
You're nothing, nothing if not lovely,
Nothing if not dazzling, nothing but pure gold,
You're frightening, frightening me when you say
That you might go away,
You're boring, boring into my heart to stay.
You're cheap, dear, cheap at any price, dear,
Cheap for such a diamond,
Cheap for such a pearl,
What I said before, I'll say again,
You're awful, awful nice to be my girl.
Betty Garrett:
You're old, dear, old with worldly wisdom,
Old like Gordon Soda, old like finest French champagne,
You're so-so, so-so, so-so kinda charming,
So-so kind of witty, so I can't explain,
Frank:
Can't stand you, I can't stand you giving some fellow the eye,
Can't stand you in the arms of another guy,
Who needs you? Need you to distraction,
Need you too this crazy, need you rain or shine,
Both:
I'm the one who needs you,
And I think you're awful, awful nice to say you're mine.

Ann Miller

























Ann Miller, fue una actriz y bailarina que supo encontrar su lugar, deslumbrando con sus largas piernas, su cabello renegrido y su imponente sensualidad y simpatía a toda la audiencia a lo largo de más de dos décadas en la pantalla y toda su vida sobre escenarios de teatro.


Su nombre real era Johnnie Lucille Collier. Y no se sabe con exáctitud cual fué su fecha de nacimiento, entre las distintas fuentes que aparecen, citan los años: 1923, 1921, 1919, 1912, todos el día 12 de abril en Texas (Estados Unidos). De muy pequeña se mudó a California con su madre, en busca de comenzar una nueva etapa lejos de las infidelidades de su esposo.
En la nueva ciudad, y a muy temprana edad, comenzaría a estudiar danza y a presentarse en humildes espectáculos escenicos. La suerte golpearía a su puerta adentrados los años 30, gracias a un buscador de talentos que la llevó al mundo del cine, cuando intervino con papeles pequeños en “Anne Green Gables” (1934), y “Una chica angelical” (1934). A partir de ésta época por recomendación de su agente, fué cuando comenzó a utilizar como nombre artístico Ann Miller.

Miller supo madurar su talento, derrochar carisma y estar en el momento justo para sumarse al apogéo. Su detonante fue acompañar a Ginger Rogers, en el film “Stage Door“. En los últimos años del decenio filmó “Damas del teatro” (1937), “El hotel de los líos” (1938) de los Hermanos Marx. Y “Vive como quieras” (1938) donde el exitoso director Frank Capra, la convocó para ésta comedia cálida e irónica acerca del amor.

Sus largas piernas y su garbo en el baile brillaron principalmente en los años 40 y 50. "Go west, young lady" (1941) de Frank Stayer, "Hey Rookie" (1944) de Charles Barton, "Easter Parade" (1948) de Charles Walters, "Un día en Nueva York" (1949) de Stanley Donen y Gene Kelly, "Kiss me Kate" (1953) de George Sidney, y "The Opposite Sex" (1956) de David Miller, son algunas de sus películas más importantes.

En 1956 Ann dejó la pantalla grande, trabajando principalmente en el mundo de la televisión y en el teatro, cosechando en el año 1979 un triunfo comercial en Broadway con "Sugar Babie", obra co-protagonizada por Mickey Rooney.

El 22 de enero del año 2004, Ann falleció, con quizás 81 años.

4 de noviembre de 2009

Beatrice


Tanto gentile e tanto onesta appare
La donna mia quand’ella altrui saluta
Ch’ogni lingua diven tremando muta
E l’occhio non l’ardiscon di guadare

Ella si va sentendosi laudare
benignamente, d’umiltá vestuta
e par’che sia una cosa venuta
dal cielo in terra a miracol mostrare

mostrase si piacente a chi la mira
che da per li occhi una dolcezza al core
che sentir non la puó chi non la prova

e pare che en la sua labbia se muova
un spirito soave pien d’amore
che va dicendo a l’anima: sospira.

Dante Alighieri

2 de noviembre de 2009

Matisse y Goethe


"Wilhem, ¿qué sería sin amor el mundo para nuestro corazón? Una linterna mágica sin luz. Apenas pones la lamparilla aparecen sobre tu blanca pared imágenes de todos los colores. Y aun cuando no fueran más que eso, fantasmas pasajeros, constituyen nuestra felicidad si los contemplamos como niños pequeños y nos extasiamos ante esas maravillosas apariciones. Hoy no he podido ver a Lotte, me retuvo una visita ineludible. ¿Qué hacer?. Le envié mi criado solamente por tener a mi alrededor alguien que hoy hubiera estado cerca de ella. Con que impaciencia le estuve esperando, con que alegría volví a verlo. Si no me hubiera dado vergüenza me habría gustado tomar su cabeza y la habría besado. Cuentan de la piedra de Bolonia que si se la pone al sol absorbe rayos y resplandece algún tiempo durante la noche. Lo mismo me sucedió a mí con el criado. La sensación de los ojos de ella se habían posado en su rostro, en sus mejillas, en sus botones y en el cuello de su casaca ¡hacíamelo tan sagrado, tan valioso!. En aquel instante no hubiera cambiado mi criado por mil táleros. ¡Me sentía tan a gusto en su presencia...! Dios te libre de reírte. Wilhem , ¿será la felicidad producto de la fantasía?"

Werther.